LA SEPTIMA MUESTRA

ADAPS  la consecuencia de un impulso

Prof. Francis Gásperi

Se dice que el arte es una cuestión de emociones, una manifestación tangible de un proceso caóticamente interno. La búsqueda obstinada de claves para abrir ciertos mundos personales. Lo que sea que fuere, arte es emoción. Si uno no se emociona no encuentra fácilmente la vía de comunicación para afuera. Para mí, es la consecuencia de un impulso vital disfrazado de líneas, colores, sonidos, movimientos, manchas y formas. Y en estos impulsos vemos lo que artistas de Soriano vienen mostrando en la Casa de la Cultura desde este primer viernes de noviembre. Una muestra muy especial, impulsada con nuevos artistas e innovaciones estéticas de forma y contenido. Creaciones que evidencian una búsqueda silenciosa pero pertinaz, inquieta y creativa. Comienzo con el feliz hallazgo de Juan Antonio Correa de sus ready-made( foto), sus creaciones tridimensionales tienen el encanto y complejidad de la cosa hallada, la recopilación razonablemente caótica de pequeños retazos de madera que encierran una historia. Un relato plástico de indeterminadas lecturas y relecturas. En lo personal admito que la madera tiene un encanto particular y si esta “humanizada” se podría hasta leer su historia, el dialogo entre el hombre y la máquina hasta transformarla y darle otros significados. Esta vez el artista la resignifica. Otro artista que no aparenta tener techo en su creatividad plástica es Enrique Quique Rey. Ha resuelto con categórico nivel sus obras hermanas en delicadas gradaciones en violeta y azul, sus cromáticos tubulares, una mezcla de arte abstracto-óptico, con resabios de minimalismo formal. Una sencillez estética y armoniosa. Delicadeza y sensibilidad son las formas llenas de movimiento que construye la reconocida escultora Nancy Fierro. Esta vez el material innovador es el PET, dándole entrada al mundo versátil del arte. Su mensaje cargado de poesía a favor Gaia no ha tenido mejor traducción que la utilización del polímero. Esa materia que nos contamina Nancy la reconvierte en arte. En el marco de una noche cálida  la muestra estuvo prestigiada con la presencia de nuestro gran artista Fernando Cabezudo, el cual me comentaba de los grandes progresos que se han visto, nuevos artistas que se lanzan a diferentes lenguajes, motivándole grata sorpresa el muy buen trabajo de José Santana, collage en azul. El veterano artista continua con su pertinaz trabajo diario, “todos los días estoy pintando” sabemos de su compromiso inclaudicable con el arte, actualmente está exponiendo unos seis grabados en el Museo Blanes pero siente que es necesario  darle más cabida y apoyo a los jóvenes artistas emergentes. Por supuesto que apoyamos esta observación. El público presente, personalidades de reconocido apego por el arte y con mucho mundo visto a cuestas, se encontró con obras y propuestas muy interesantes. Germán Arias nos presenta una obra de gran formato, fiel a su estilo se ha decantado por el grafito y el lápiz color, sus formas serpenteantes nos lleva a mundos surrealistas cargados de misterio y múltiples interpretaciones. Hubo lugar para nuevas herramientas tecnológicas, entre Romina Cocco y Carlos López  muchos años los separan pero la inquietud que abre el arte digital con sus infinitas posibilidades, los une en muy interesantes propuestas expresivas, cargadas de emoción y cariño en Romina y su mascota y López en la fuerza dinámica de sus toreros. Ismael Capurro ha encontrado el perfecto equilibrio entre pintura y diseño gráfico. Color y diseño. A su aporte plástico le agrega, la poesía libertaria de los sesentas y la utopía. Con “la casa de al lado”, su recuerdo se convierte en homenaje al vecindario. ¡Quien no tuvo una casa de al lado que lo acompaña siempre!  Danilo Cardona consigue romper con la estructura única del cuadro, lo fragmenta y nos ofrece un constructivo abstracto muy personal de interesante impacto visual. Un collage cargado de simbolismo completa su muestra. Giselle Ohaco nos proporciona sus abstracciones que nos remonta a los expresionistas de la década del cincuenta, color vaporoso y sutil, cargado de espiritualidad. Un contrapunto texturado y armonioso completa su propuesta. Olga Brazuna vuelca generosamente en la materia buscando la tridimensionalidad conjugando un muy rico empaste cromático, con sus escenas de tango en el patio, sus  carretas y vacas. Elbio Altieri de pincelada cuidadosa y aferrada al realismo, presenta el carrito con un muy buen juego de luces y sombras. Otra de sus obras, corresponde a una escena costumbrista cargada de añoranzas. Planismo, geometría y color nos regala Emilia Plorutti, un diseño apoyado en el dibujo, vertebra  toda su estructura. Una interesante metafísica del color. Judith Lapido nos muestra sus acuarelas con una excelente entonación y manejo muy sensible de la técnica. Patios y puertas nos trasladan a tiempos pretéritos. El pequeño formato le brinda mucha calidez y refinamiento. Julia Gandarias sorprende con su tríptico desestructurado de una flor, una muy original manera de resolver un tema conocido dentro de la plástica. Fernando Pereira nos ofrece un trabajo de múltiples vistas, urbanas y espacios internos con un diseño intrincado y vibrante a través de brevísimos espacios de color, todo un estilo personal. Charbonier nos presenta la tranquilidad del rio con sus camalotes. Dalmás ha logrado un increíble color en sus frescos duraznos. Ruben Castro un cuidadoso retrato al oleo donde atrapa muy bien la mirada de la joven. Las estampas de G.Basileff  muy bien ejecutadas a lápiz nos comunican el mensaje directo de los hombres de campo, con el infaltable giro humorístico. Liana de la Fuente  muestra sus caballos  al galope libre, una obra muy interesante desde la dinámica que plantea, enmarcado en ese cielo poderoso a punto de estallar. Ernesto López Millán, presentó  el portón de campo de Colonia del Sacramento con  la altísima calidad gráfica que nos tiene acostumbrados, además un trabajo con mucho contenido de crítica social, se trata de un hiperrealismo insuperable logrando plantear el tema de la corrupción con un sentido humorístico inigualable.  Una muy buena expresión de emociones que viene creciendo año a año, con el acercamiento de nuevos artistas a la asociación que esperemos sigan sumando. Y así amigos, vamos llegando al final de estas nuevas impresiones que nos deja la séptima muestra plástica de Adaps, resta  agradecer a nuestro público y… ¡a por la octava entonces!